La moralidad está entretejida en la tela de todas las enseñanzas Budistas; es la base sobre la cual la iluminación se hace posible. La sabiduría no brota solamente de la inteligencia del cerebro; requiere un corazón abierto, lleno de mérito. Así, al adoptar, practicar y realmente internalizar la enseñanzas de la moralidad, creamos las condiciones que pueden llevarnos a la liberación de la confusión y el sufrimiento y por ello, al entendimiento.
Amor y Cariño
El amor se enfoca en la felicidad y sus causas; a través del amor, activamente llenamos a los otros (y a nosotros mismos) de pensamientos y sentimientos amorosos.
Particularmente en Occidente, hay una creencia de que el amor—inclusive el amor paternal—está basado en el mérito: Merecemos ser amados por la manera en que hemos actuado o lo que hemos logrado. Pero el amor genuino es incondicional. Todos merecen ser amados, protegidos—y estar libres de sufrimiento.
El amor y el cariño son como un espejo; cuando se los damos a otros, también nos beneficiamos. Cuando le sonreímos a alguien, también nos sonríen. Cuando proyectamos emociones positivas, esas emociones apartan a las negativas de nuestras mentes. Cuando creamos un aura de amor para otros, nosotros mismos sentimos amor también.
El amor y el cariño trabajan en conjunto con la compasión.
Compasión
La compasión se enfoca en liberar a otros de la infelicidad y de todas las causas de la infelicidad. Al igual que el amor y el cariño, es una práctica que requiere ver que todos la merecen por igual; no puede surgir de la pena o de la superioridad. Mejor aún, brota del entendimiento de que todos los seres están sufriendo de alguna manera y del deseo de ayudar a aliviar o eliminar ese sufrimiento.
En un nivel más amplio, la compasión también contribuye a nuestro propio desarrollo espiritual. Cuando pensamos en las necesidades de otros, nos enfocamos menos en nosotros mismos y al hacerlo, encontramos liberación de nuestro propio sufrimiento.
La compasión trabaja en conjunto con el amor.
Generosidad
La generosidad es dar intencionalmente de nosotros mismos para ayudar a otros. La verdadera generosidad viene de adentro y es algo que todos pueden practicar—inclusive los mendigos. La generosidad material fácilmente se entiende; sin embargo, generosidad también incluye el dar tiempo, habilidades, elogios, consejos y conocimiento.
Por supuesto, la generosidad debe practicarse con la guía apropiada y un entendimiento verdadero. Porqué, porque lo que damos y a quien se lo damos hace la diferencia. Si damos simplemente como un favor o porque pensamos que se va a ver mal si no lo hacemos, eso es dar social; no es de nuestros corazones. Si le damos a alguien un arma simplemente porque la pide, puede ser generoso, pero puede causar mucho daño. Si le damos una botella de agua a alguien que no tiene sed no significa mucho, pero si se la damos a alguien en el desierto significa mucho.
Ultimadamente, la generosidad es una forma de aproximarse a la vida que surge del amor y la compasión—moderada por el sentido común.
– Kalhil Gibran
Purificación Mental
La purificación mental es pensamiento positivo. En realidad, no sabemos si el vaso está mitad lleno o mitad vacío. Pero pensar positivamente es mejor para nuestras vidas y puede minimizar el sufrimiento.
- Aprecia lo que tenemos, en vez de aferrarte a pensamientos negativos por lo que no tenemos.
- Entiende que cuando buscamos imperfecciones vamos a encontrar muchas; cuando miramos positivamente, todavía vemos las imperfecciones, pero no parecen tan importantes.
- Date cuenta que la imperfección no es mala; es simplemente parte de cómo vivimos y de lo que somos.
En resumen, enfócate en los aspectos positivos de la amistad, la salud, las relaciones, el dinero—todo.
Causalidad
Por ejemplo, para sembrar un árbol de roble se requiere una bellota, suelo fértil, el sol, agua, espacio y tiempo suficiente. Cuando estas condiciones se juntan apropiadamente, una pequeña bellota se vuelve un enorme roble; si un elemento cambia, el árbol será menos robusto—o quizás nunca crezca.
Esto sucede en la vida humana también. Quienes somos depende de lo que hacemos, lo que pensamos, y en lo que creemos. Cada pensamiento y acción deja una impresión en nuestras mentes. Con el tiempo, estas impresiones cambian nuestro carácter, afectando todo en nuestras vidas.
Devoción
La devoción es la base de la relación entre el estudiante y el maestro. Al ver la cualidad innata del estudiante, el maestro está abierto y tiene mucha bondad, compasión y respeto. De forma similar, el estudiante tiene gran respeto por la sabiduría activada del maestro, a la cual el estudiante debe estar completamente receptivo. De hecho, la sabiduría es el verdadero maestro.
VIVA MEJOR
La vida es compleja, desconcertante y a veces dolorosa.
Alguna veces parece que debe haber una mejor forma
de arreglárselas—y la hay. Es tan simple como mirar
a un problema desde otra perspectiva.
HAGA UNA PREGUNTA
Si tiene problemas o simplemente tiene curiosidad,
puede ser de utilidad el acercarse a alguien notable
por su sabiduría. Rinpoché estará complacido en responder preguntas
sobre la vida, el Dharma o Budismo en general.
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